En otro articulo de esta publicación; Luis Almagro,
secretario general de la OEA, (Organización de Estados Americanos), daba por
finalizada la democracia en Venezuela.
En
Burgos a 4 de octubre de 1918, el gobernador de esta ciudad Andrés Alonso,
firma en el boletín publicado el día 25
de ese mes, una nota advirtiendo la necesidad de evitar fiestas y reuniones
multitudinarias, (aún no se había inventado el 8M); el tema en cuestión era
minimizar el daño de la gripe reinante en esos momentos, conocida después como gripe
española. En la nota recuerda a los burgaleses, que la infección se propaga por
las gotitas de saliva que despide el que habla o tose. A continuación, pide
evitar la estancia en locales cerrados donde se reúna mucha gente, bares, cafés,
etc. Que se tengas abiertas todo el día las ventanas de las habitaciones. Estar
en el campo el mayor tiempo posible, porque el aire libre , el agua y la luz
son los mejores desinfectantes en esta ocasión…..
(Zamora
en esta epidemia de 2020, debido tal vez a su actual dispersión natural sobre
todo en la zona oeste, es hoy una de las de menor mortandad, sin embargo en la segunda
oleada de la de 1918, triplicó la media nacional. Se comenta, se dice que tal
vez la iglesia, ayudada por la fe, contribuyó a propagar mucho la enfermedad.
Algún obispo debió achacar al pecado dicha enfermedad y comenzaron a celebrarse
actos religiosos contra la gripe. En estos, los fieles besaban con
profusión al santo protector de la peste,
mi querido San Roque, acelerando con ello el contagio).
Pero
volviendo al asno, y para que quede constancia de la evolución Darwiniana de
los equinos, en esta pandemia, el coronavirus debe de tener patas o alas, por
lo que se les obligó a la gentes de
estos pueblos que ahora están casi deshabitados a recluirse en sus casas, a no
salir ni para regar los tomates; y si a alguna persona se le localizaba sola en
el campo, era conminada rápidamente con malos modales verbales y otras veces
pecuniarios para que se pusiera a cubierto; no porque el virus lo localice
detrás de un pedrusco y un bosque de escobas, es para que la gente se vaya acostumbrando
a lo que les espera; ¿o alguien se cree que lo de prohibir llevar la bandera de
ESPAÑA en el coche este domingo pasado en Madrid fue casualidad? ¿O alguien
cree también, que el incitar a la gente para denuncie a su vecino porque ha parado un segundo a darle los buenos días
al cartero es casualidad? ¿Y qué opinan de “algunas personas mayores”, lanzando
unas miradas a los niños como si estos pobrecitos fueran sus asesinos? Qué
triste. ¿O alguien cree que mañana va a acabar este estado de excepción sin
control parlamentario que es el de alarma?
¡Pues ale, Viva Venezuela!
Esta
entrada estaba preparada para ayer, pero no tenía ganas.
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