domingo, 15 de marzo de 2020

De madrileños y peluqueras

Arco iris que se veía sobre el Pozo de los Humos días pasados desde la Vídola.
(Ya sé, el dedo, es que os fijais en todo)

Los que tenemos una edad y seguimos dando guerra, hemos sobrevivido a multitud de plagas, unas Divinas y otras Inventadas. A la categoría de las primeras, la más importante, corresponde a los años que, a cada vuelta que damos al Sol, acumulamos a nuestras espaldas. En el antiguo régimen, la mayoría de los otoños sufríamos la plaga de la pertinaz sequía como así nos lo recordaba el antiguo Jefe del Estado. También el contubernio judeo-masónico; este no sé qué virus sería, pero siempre salía a relucir cuando por la circunstancia que fuera, las cosas no iban también como querían los gobernantes. Y sobrevivimos. La captura de (laprovincia) aclara bien, las últimas plagas divinas a las que la mayoría hemos sobrevivido.

 Quizás esta última que pasamos en este momento, la llamaremos la de la cagalera repentina. Se dice que en época de grandes desgracias, unos lloran y otros venden pañuelos. Pañuelos y rollos de W.C. y vaya si han vendido.
En cuanto a las plagas inventadas, casi todas están juzgadas, y algunas injustamente sentenciadas. (Acaba de pasar el 11 de marzo, yo ahí lo dejo).
Ahora; echarle la culpa a los madrileños, y más en estos pueblos de la Ribera que como todos sabemos son los que más han nacido donde quieren; (mas que los de Bilbao), me parece injusto. En los equipos de fútbol madrileños nunca le han preguntado a nadie donde han nacido. Y cuando han ido a trabajar, tampoco.
Dicen algunos de los que saben de esto, que los virus llevan con nosotros toda la vida, e incluso alguno comenta que nos precedieron. Acostumbrémonos a ellos pues seguirán con nosotros. Los organismos vivos suelen adaptarse a ellos. Claro que, como el ministro de consumo actual tenga que decirle a los responsables de las cadenas de distribución españolas como tienen que hacerlo…….Ahora entiendo porqué la gente antes de que esto suceda, atiborren su despensa. Recuerdan que los que aquí mandan, asesoraron a vaciar las estanterías de los comercios enVenezuela y claro; el miedo es libre.
Por cierto, como el Bar de Masueco debe permanecer cerrado, y algunas de las camareras son peluqueras, ya está: Peluquería el Cortijo. Suerte que hace falta; y mientras tanto los lugareños; bodega y vino; no seguramente no cura, pero acorta lo larga que se va  a hacer la cuarentena.


P.D. Al final no se admitieron las peluquerías  como animal de compañía. Por tanto; alguna ministra terminará el encierro con pelos de bruja, y algún ministro con dolor de cuello por dormir en el sofá. Repito; bodega y vino.
 

2 comentarios:

  1. Alcohol en formar de vino para mantener a raya el virus

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  2. La epidemia de la mal llamada gripe española del siglo pasado se saldó con tres fallecidos en Masueco, es verdad que tenía mas habitantes. Si de esta salimos indemnes, que vayan preparando el bar.

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