OTRA NAVIDAD

La otra Navidad. Presepio en la Nueva Normalidad

Camino a la N.N. Nueva Normalidad, Nueva Navidad, o lo que nos venga después, no tengo más que dudas. De momento con los fallecidos, o alguien cambia los sumandos, o la operación está mal hecha. Desde el día 19 de noviembre, el centro de coordinación de alertas y emergencias sanitarias que dirige el tal Fernando Simón, da hasta el día 22 de noviembre: 210-180-150-135 fallecidos; como se ve descendente. Pues hoy día  24 de noviembre, las comunidades dan para el día veintitrés; 270 fallecidos, sin contar el país vasco que no los actualiza desde el 15 de este mes y Cataluña que hace lo que le da la gana. Como parece poca discrepancia, va el ministerio de sanidad y  comunica el dato más alto de este segundo brote 537. Luego se extrañan que los españoles sean los que más rechazo tienen a ponerse la vacuna. Yo de las vacunas me fío de casi todas. De la que estos matemáticos  compren lo tengo claro, o les engañan en la calidad o estos nos engañan en el dinero. Dado lo cual, prefiero que me sigan robando.

Mientras tanto, el comité de expertos que asesora a nuestros mandatarios en esta Nueva Normalidad que vigila, dentro del estado de alarma, el que podamos celebrar agnósticamente esta Nueva Navidad que tenemos en puertas; ha decidido marcarnos unas pautas esenciales pensando siempre en nuestra salud.

6 personas como máximo en celebraciones familiares si hay algún no conviviente. Por negociaciones desconocidas, tienen firmado una tregua con el virus para que el día 31 de diciembre no actúe hasta pasada una hora la media noche. Lo mismo sucede con las noches de Reyes y Santa Claus, a los que se les dará una hora más para que al menos a nuestros dirigentes les puedan llenar los zapatos de carbón. Para celebración de la Natividad, (la misa del gallo), otra vez que me toca enlazar el cuento de Antonio  Burgos, “el día que Jesús no quería nacer”, y es que no es para menos.

En cuanto a cenas de empresa, Madrid lucha por diez personas en mesa. Castilla León, si es que a este paso le va a  quedar alguna, seis. De visitas a Belenes nada. Campanadas en casa, hace menos frío y  además, cabe la posibilidad que en la tele a alguna starlette se le transparente algo. La cabalgata de reyes cumple estrictamente la normativa, tres sabios y tres pajes, (este tipo de  camellos no cuentan), el resto de los ciudadanos, tampoco.

Hablan de dejar entrar en la comunidad a las personas que son de ella. Sobre este tema están estudiando una serie de criterios que establecerán y que seguramente serán de imposible cumplimiento (por tanto sancionable), además de infructuoso. Señores mandatarios, cada uno se cura con aquello que sabe le hace bien. A mí por ejemplo son los abrazos de mis nietos; ah, y el vino con los amigos. Con ustedes ni harto de ello.