miércoles, 27 de enero de 2021

El confinamiente que viene (es que le han cogido el gustillo)

 

La caza como arte: Mantener el equilibrio de la fauna salvaje (Masueco)

La caza como deporte: Recuperar las piezas del fondo de los Arribes

Se veía venir. En septiembre del pasado año 2020, ante la aparición de los primeros casos de peste porcina africana en ejemplares de jabalíes aparecidos muertos en el estado de Brandeburgo frontera con Polonia, las autoridades alemanas tomaron la decisión de reducir la población de estos animales intensificando la caza de los mismos, sobretodo, en zonas cercanas a poblaciones y granjas de porcino. En el siglo XIII en España, en la época de Alfonso X el Sabio, la caza se consideraba un arte, y sigo siendo partidario de ello: “El arte de mantener el equilibrio de los animales salvajes en libertad”. En Francia, hoy día, es el ejército el que está apoyando a los cazadores a controlar la población de estos gorrinos; pero claro; allí los sindicatos de agricultores y ganaderos no se andan con chiquitas. Aquí se lleva pidiendo por parte de algunas asociaciones de estos gremios que se haga lo mismo, pero creo que nuestros mandamases sueñan con otras cosas. No digo nada sobre el peligro de los circulantes de algunas carreteras. Si hablamos de Salamanca, por ejemplo, en la CL517 y sus alrededores, no hay día que no haya un susto con alguno de estos animales.

En Francia, país que en este tema se ve que está muy lejos, fue declarada libre de tuberculosis bovina en 2001. Pero las modas cambian, y en el año 2004 ya volvían a contar con varios casos aunque sigan manteniendo el control. En mayo del pasado año, (2020), vino a España un grupo de (expertos), veterinarios franceses, para colaborar con representantes españoles en el estudio de la situación. (Primera nota de prensa: “La unión europea ha apoyado una red transpirenaica de investigación y desarrollo de herramientas innovadoras para el control de la tuberculosis animal, con un panel de “expertos” de Francia y España que lo llevarán a cabo, entre los que se encuentran “veterinarios”).  Esta vacía parrafada subrayada es la que me hizo dudar ; ahora, que entre ellos había veterinarios, ya es para llorar; ¿que co….. va a haber en ese panel de expertos  si es una zoonosis?; ¿Que mandaron entre el grupo de españoles? ¿Ecologistas y veganos quizás? El problema es que esta enfermedad también es transmisible al hombre. Pues esperen, que nuestros mandamases sueñan con otras cosas.

Hace varios años se pudo comprobar que alrededor del 70% de los ciervos que se habían cazado en los montes leoneses, eran positivos en tuberculosis bovina. Si comparten espacio con el ganado en extensivo, ya está el problema; ¿Qué problema? Ninguno: Se confina toda la ganadería de la zona y ya está. Pues no le hemos cogido gusto “ni na” al confinar. Pues ya lo tienen; hoy 26 de enero la Junta de Castilla y León declara el cierre perimetral para 382 explotaciones ganaderas de la zona de Vitigudino. Por tanto ya sabemos: Ganado estabulado en las naves, comida ensilada, mientras “hierbos” y zarzas creciendo en el campo. Resultado: Ciervos, rebecos y demás, disfrutando e infectando a pata suelta las fincas del ganadero. Asique este verano, con el agua que ha caído como le dé por calentar…. bueno, hay gente con iniciativa que seguro aprovecha la ocasión. Aquí les doy una pista a los jóvenes emprendedores por si quieren crear una franquicia: “El incendio forestal, como modelo de negocio”. Y el día que haya un caso de la enfermedad en humanos ya saben: Todos confinados en sus casas. Es que se sueñan con ello.

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